El mitin por la libertad de Mario González García celebrado afuera del 2º Tribunal Colegiado del Poder Judicial de la Federación el lunes fue el último acto de la Quinta Jornada por su libertad antes de la marcha anual del 2 de octubre que se llevará a cabo este jueves.
De no estar injustamente encarcelado, Mario seguramente estaría participando en la marcha conmemorativa de la masacre de Tlatelolco este año, como fue su intención el año pasado.
Pero ese 2 de octubre el joven defensor de los derechos estudiantiles y otros ocho activistas fueron bajados de un camión por la policía ANTES de llegar a la marcha.
Desde el 2 de octubre, Mario ha estado en manos de un sistema de injusticia que representa un verdadero peligro para la sociedad.
El lunes una comisión entró en el tribunal para presentar cientos de firmas en apoyo a Mario a la magistrada Irma Rivero Ortiz. Al salir, su madre Patricia García Catalán explicó que la magistrada les atendió y entre las cosas que comentó es que “dentro de los tiempos, para el 2 de octubre ya viene a asignarse lo que es el ponente, el magistrado que se va a encargar de dar la resolución en el caso de Mario”.
“Se espera que no alargue el tiempo del secuestro de mi hijo por parte del Estado. Estamos hablando de que mi hijo lleva un año. Mario no es delincuente. Es un estudiante universitario, una persona consciente. No está solo. Hay mucha gente en muchas partes del mundo que se han manifestado por su libertad. Entonces queremos justicia. Y de antemano sabemos que lo justo es que mi hijo salga absuelto. Seguiremos haciendo acciones hasta que salga de ahí. No nos vamos a callar.”
Durante el acto, el compañero Jaime de Cruz Negra Anarquista resaltó que “Los compañeros fueron bajados del camión por el simple hecho de ser jóvenes, de ser conscientes, de defender la educación pública. Sufrieron tratos crueles, vejaciones, tortura. Este gobierno del Distrito Federal dice que es de la izquierda. Quiere que todo el mundo lo vea como democrático y progresista, pero este gobierno tortura. Ese día su policía torturó a Mario González y a los otros compañeros.”
Jaime siguió explicando que el Ministerio Público los mantuvo incomunicados y los fabricó delitos. Cuando fueron trasladados al Reclusorio Oriente, les pusieron fianzas exorbitantes que, gracias a la solidaridad, fueron pagadas. Pero al salir Mario fue inmediatamente detenido otra vez por órdenes de la juez de consigna Marcela Ángeles Arrieta, quien dice que él es un peligro para la sociedad y por eso su fianza le fue negada. Un mes después, la revocación de la fianza fue avalada por otra desgraciada funcionaria de consigna, la magistrada Celia Marín Sasaki.
En ese mismo momento, Mario se declaró en huelga de hambre y pasó 56 días sin probar alimento. Aunque él siguió firme en la convicción de su inocencia, los tribunales no lo querían escuchar. No atendieron las demandas. El 10 de enero de este año fue sentenciado a 5 años con 9 meses, una sentencia confirmada en marzo. En julio, recibió un amparo, bajo el cual debería haber salido de la cárcel, pero aunque la magistrada Celia Marín Sasaki bajó la sentencia levemente, ella aseguró que no fuera suficiente para que él pudiera salir bajo fianza.
Los otros compañeros y compañeras detenidos con Mario hace un año son Aztlalli Cabrera Prado, Irene Pérez Villegas, Erick Leonel Aguilar Ruiz, José Luis Ramírez Alcántara, Cristian Antonio Carmona Emmer, César Uriel Cruz Elías, Carlos Jhasi Jarquín Peña y Hugo Guillermo Mejía Ventura.Ellos lograron salir bajo fianza pero siguen con proceso.
El lunes, hicimos una entrevista con el compañero Leo, quien dice lo siguiente:
“Un saludo a todos que escuchen y gracias por estar atento a las actividades que se han hecho por Mario y esta lucha que es continua, es imparable.
“¿Y qué ha pasado en este año? Pues han pasado muchas cosas y para mí una cosa importante es que el apoyo que se ha dado a Mario en especial es una victoria. Ha habido una repercusión a nivel internacional por el caso. Más que eso, también seguimos unidos, seguimos firmes y a pesar de este golpe que se dio, seguimos aquí. Seguimos aún más fuertes por lo que ha pasado.
“Una de las cosas que hay que decir es que nos hemos dado mucha cuenta de cómo está tan cabrón la represión estatal hacia cualquier activista. Lo hemos vivido desde el pasado 2 de octubre. Pensamos que desde el principio los hechos apoyaban la libertad de Mario pero las autoridades no han hecho nada bueno, sino todo para callar su voz. Después de la huelga de hambre, pensamos que tal vez iban a sentir más presionado pero siguen firmes en su posición.
“Pero después de que lo que pasó cuando le bajaron la sentencia a 5 años y 1 mes y 15 días, vimos un retroceso de ellos. Nos dimos cuenta que ya no pueden seguir atacando. Ahora están a la defensiva. Y bueno, nosotros vamos a seguir aquí adelante. Nuestro caso ha seguido muy estático. Aún no tenemos sentencia, aún estamos esperando a que nos entreguen los videos de las cámaras de vigilancia donde se puede ver que todo lo que nos imputan es falso, es un montaje. Es lo que hemos dicho desde el principio. Y bueno, seguimos recalcando que es la UNAM que es el responsable, Narro y el gobierno del Distrito Federal son los principales responsables. Todos que han participado en la represión tienen nombre y cara y puesto en el gobierno. Nosotros vamos a seguir manifestando que tienen preso a Mario y de una forma nos tienen preso a nosotros, pero fuera, como procesados. Pero como te dije, seguimos fuertes. Esta lucha es imparable”.